Nada más empezar en el porno, la guarrísima jovencita Yarisa Durán tuvo la suerte de convertir en realidad una de sus fantasías más calientes con Nacho Vidal y otros tres chicos amateur que le metieron mano en el metro hasta hartarse.
Después se fueron todos a casa de Nacho donde la deliciosa Yarisa aprendió en pocos minutos las bases del arte erótico.